Aquí estamos, al final de este viaje. Todavía no me puedo creer que todo haya  pasado tan rápido y tan lento a la vez. Han transcurrido nueve meses increíbles, difíciles, con bajones, maravillosos, a veces frustrantes, pero en su mayoría felices e inspiradores. Ya no soy la misma que llegó a Barcelona en septiembre de 2016.

Alcancé mi mayor expectativa, algo increíble teniendo en cuenta que no ocurre siempre y que la mía era tan grande e imprecisa que ni siquiera estaba segura de que fuese a funcionar. Seré totalmente honesta: adivinar lo que quería hacer relacionado con mi carrera profesional y mi vida era una expectativa bastante grandiosa. Ya había encontrado la respuesta o al menos el comienzo. Me di cuenta de cuánto me gustaba la educación no reglada y la creatividad que requiere transmitir mensajes importantes. De esta manera, al hacer el SVE en FCV he tenido la oportunidad de probarme a mí misma en el campo del asesoramiento y me siento muy agradecida, ya que me ha dado autoconfianza y motivación para seguir formándome en este ámbito.

sve-aleks (1)A lo largo del camino he conocido a mucha gente interesante e inspiradora, con la que espero estar en contacto durante un larguísimo tiempo. He aprendido un poco de catalán y he mejorado mi español, he ido a los mercadillos y a bailar cada fin de semana, he hecho picnics en los bonitos parques de Barcelona, he encontrado lo que me gusta y lo que no, he conocido dónde comienza y dónde termina mi zona de confort, he mejorado y he seguido definiendo mis propios límites. He aprendido a manejar mis propios conflictos y a no huir de ellos, y ¡me he enamorado de la consolidación de la paz y de la educación para la paz!

“¡Hazlo, adelante, pero estate preparado para trabajar en tus propios miedos, límites, bloqueos mentales, prejuicios, expectativas y actitudes!“. Éste es el único consejo que doy a quien esté pensando en hacer SVE. Porque lo más importante de un SVE es cómo decides cambiar y experimentarlo.

Veamos ahora a dónde me lleva la vida. Gracias, FCV y Barcelona por esta increíble experiencia.

Aleksandra Stojanovic